Se sigue hablando de la gesta futbolística del sábado por parte del Real
Madrid y me sigue escociendo y me sigue dando mucho qué pensar, no sólo por lo
que supuso perder para el Atlético de Madrid, equipo sufridor por antonomasia,
sino lo que significa perder y volverte a levantar, recomponer figura y
caminar. Este pensamiento lo ligo a la imagen de mi hijo Javier, un chico que
planta semillas cuando nadie le ve ni le siente, traga palabras innecesarias,
pierde con frecuencia y tira “palante” como ninguno, y que con esa actitud nos enseña a todos tanto cada día. El domingo no había más
que mirarle, sobraban palabras, es más, si hubieras osado utilizar los
consabidos consoladores, frases hechas, dulces y sinceras, te las hubiera
estampado en tu propia cara; la herida sangraba demasiado, la derrota de su
equipo en el último minuto era tan cruel como legal, como real… Y mientras que
hoy es miércoles y aún sigo dando vueltas al moliniño, seguro que Javier ya
está caminando recto, con la mirada escudriñando el horizonte igual que Simeone
haciendo encaje de bolillos para buscar nuevos talentos para que ocupen el
lugar de los que se van. Es decir, levantarse, partir de cero y caminar; duro,
muy duro y, sin embargo, diariamente eso lo hacen miles de personas anónimas,
pero a ellas no se las conoce, y sin embargo a Simeone, al Atlético de Madrid,
sí, y esto es muy importante porque ese equipo tan acostumbrado a perder,
levantarse y caminar nos está dando una lección de vida dejando aparte la
pelota.
Las victorias saben a manjar de dioses y si encima practicas el tan de moda
deporte del Mindfulness (termino inglés q se refiere a la capacidad para
atender y disfrutar plenamente de lo que estamos haciendo, sintiendo, en cada
momento de nuestra vida), esas victorias te sabrán, seguro el triple. Peeeero
ganar es difícil como efímera la suerte y la alegría y el perder es lo más
común en los mortales, debemos sacar “chicha” de las secuelas y la sensación de
la pérdida. Ya lo dice un proverbio “Se
aprende poco de la victoria y mucho de la derrota”
PD Os dejo el enlace del
artículo de Lorenzo Silva para el que no lo haya leído ya que no tiene
desperdicio. Pinchad en Lorenzo Silva
2 comentarios:
Por desgracia la vida nos regala más derrotas de las que desearíamos. Sin embargo el camino es superarlas y aprender.
Besos y ánimo.
Muy guapo tu hijo en la maratón.
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