jueves, julio 17, 2008

MENUDENCIAS DE VERANO: vestirse es un arte

¿Os acordáis de la película “Con faldas y a lo loco”? Pues este verano podíamos llamarlo “Con piratas y a lo loco” Da igual hombres que mujeres, todos van iguales; parece que el pantalón pirata es la prenda “H”, y el que no la tenga, ya puede ir corriendo a abastecerse de una o estará fuera de onda. Qué más da que te siente bien o mal, que tengas el trasero plano, abombado o voluminoso, ¿y lo ideal de la muerte que vas, qué?
Me pregunto si todas las veces que nos vestimos, nos miramos al espejo aunque sólo sea una vez con los ojos abiertos y puestos en su sitio. Creo que no porque si no, no nos pondríamos muchas de los ropajes con que vestimos nuestros cuerpos veraniegos.
¿Dónde, demonios, perdimos el concepto de la estética? Para ver alguien bien apañado, ves rosarios y ristras de gente que se siente “elegante, pero informal”
Y ya no menciono las blusas, camisetas que acompañan al pirata: bien ceñiditas, que marquen hasta el último átomo de grasa, rollito de primavera que crece alrededor de nuestras cinturas. Parece que todo vale porque el verano es el verano y, en esta época del año, no importa enseñar lo que sea con tal de ir a la moda y fresquito.
Y…, en especial, me meto con las mujeres. ¿Acaso nos encontramos atractivas, femeninas, con esos trapos? ¿Nos hemos parado a mirar si nos sienta bien?
Pero lejos de estos despropósitos, hay algo que me gusta: la gente va feliz así, de esa guisa. No se siente ridícula ni nada de esos sentimientos que acomplejan y atormentan, con lo cual, ¿quién soy yo para dar lecciones de arte en el vestir? Que cada uno vaya como le dé la gana aunque esté feo…, horroroso, pero feliz que es lo más importante.

6 comentarios:

Carlota dijo...

Mira, está claro que la moda hay que adaptarla a cada uno, bajo riesgo de ir hecha o hecho un mamarracho, pero es cierto que lo ideal sería sentirte tú bien, lleves lo que lleves, aunque supongo que tal seguridad se traduciría en algo muy atrayente.
A mí, en verano, me encanta llevar faldas y vestidos, cortos o largos, es lo de menos, pero me hacen sentirme muy femenina. Un besuco.

Reina Letizia dijo...

A mí los piratas no me quedan nada bien. Me siento rara. Yo soy de minifalda y botas hasta la pantorrilla, pero no siempre puedo vestirme a mi gusto. ¿Sabes qué estilo me va? El de Alaska. ¡Lo guapa que estaría yo con el pelo naranja! Yo y la Monarquía.

Besos de Princesa

Anónimo dijo...

Preciso ejemplo de cómo una mujer puede amargar la vida (¡con lo corta que es!) a otras mujeres y sobre todo a sí misma en nombre de la servidumbre a no se sabe qué normas (Normas, serán, por lo absolutas que parecen) estéticas. Triste.

Anónimo dijo...

Es de esta manera como se consigue que las mujeres interioricen una obligación a estar "divinas" que les genera una inseguridad crónica. "Sentirse atractivas, femeninas...", ¿por qué no sentirse simplemente inteligentes, por qué no disfrutar, estar alegres? Me preocupa seriamente el modo en que se asumen esas consignas, con el daño que hacen y lo fácil que le ponen a los opresores el ejercer su dominio.

María dijo...

Cada persona debe ir vestida de acuerdo a su personalidad, para mí lo más importante es sentirse cómoda.

Un beso.

Nómada planetario dijo...

Cada cual puede hacer de su capa un sayo,pero guardaré mis miradas de complacencia para quien me apetezca.
Saludos.