viernes, noviembre 18, 2016

PALABRAS PARA TI

Hoy no vi luz en tu sonrisa.
Tu rostro permanecía aprisionado en pesares.

Quise acercarme al barco de tus días solitarios, acariciar las penas que ensombrecían el carácter de lavanda que siempre te acompaña.
Bastó una mirada fugaz para comprender lo inalterable de tu melancolía mezclada en rojos, ocres y marrones y, de pronto, me ha venido a la boca el sabor de nuestras añadas compartidas…

He oído el canto del grillo y el silencio de nuestras pisadas desde aquel verano de sol, encinas y libros rotos.

Amiga, recapitulo en mi cuaderno de vida y leo que cuando el sol se acuesta y el viento del norte sopla sobre mis acantilados nocturnos, tú ahí estás como el faro guía en un mar de tormenta.
Tu estampa incandescente fortalece a mi corazón entorpecido por el caos diario.
Tu presencia es el remanso donde deposito las palabras que salen a borbotones.
Me recuerdas quién soy sin velos difuminados…

Amiga, juntas robamos tiempo al aire para respirar el polvo del camino y compartir hazañas castigadas, aunar fuerzas para seguir.
Eres el puerto donde anclan mis lágrimas de hiel y sonrisas de luna.
A menudo navego por otras aguas, pero cuando vuelvo ahí estás, serena tu persona y mano tendida para amarrar tempestades.
Entonces, el sol calienta nuestra tierra y el sudor cae como un ángelus sobre nuestras almas.

Hoy, ante la ausencia de tu sonrisa, te recuerdo que el mar zozobra tus horas, pero jamás hiere la esencia de tu salitre, fachada marítima y costa salpicada de playas de finísima arena… Así eres tú, amiga.

Hogaño eres gaviota herida, de alas cortadas; toma las mías y vuela a tus amaneceres perdidos.

2 comentarios:

Ambar dijo...

Hermosa y triste. Lo leído tres veces para captar todas y cada una de tus palabras.
Besos

Maripaz dijo...

Tus letras me llegan con tanta profundidad, que son como un regalo para mi alma.
Muy emotivo.
Ah, me ha encantado el vídeo de la cabecera del blog, anunciando tu libro.
Muchos besos.