Voluntad pongo porque “lo que es, es, y no hay modificación posible”, así que no me gasto y acato la realidad: me he ido resignada a trabajar.
Y he comenzado a sufrir gratuitamente y para nada... Estaba yo en la parada del bus pensando lo guapa que vuelve la gente de vacaciones (cómo veréis, siempre positiva) cuando veo a un perro sin correa. Primero estaba sentado mirando fijo a un punto. Después se puso de pie, seguía mirando fijamente. Triste, se volvió a sentar. Cada vez que pasaba alguien cerca de él ladraba lastimeramente y yo arrugándome poco a poco, metiéndome en el pellejo del animal abandonado. De pronto, el chucho que permanecía sentado con el hocico a ras del suelo comienza a mover el rabo a una velocidad supersónica, pero sin despegar el hocico del suelo... De lejos vi llegar a un muchacho con las manos en los bolsillos que, al llegar a la altura del perrillo, se abalanzó sobre el animal y éste sobre el chico... Suspiré aliviada y sonreí ante el final feliz mientras me subía al bus, y el can y su amo desaparecían tan frescos con el mal trago que yo me había pasado imaginándome una realidad que por desgracia existe, más en vacaciones.
Cuando no sonreí fue al entrar al trabajo: el primer rostro que vi era el de mi jefe… Aún no he aprendido a tener el gesto impenetrable de Obama.
11 comentarios:
En el Registro de al lado, que a veces sustituyo (el jefe es mi cuñado), hay un chico bastante bien parecido -sin asustar- que debe ser un ligón, entré a preguntar por mi cuñado y saludé, el pobre supongo que se dejo llevar por la costumbre y me devolvió el saludo guiñandome un ojo, como pude contuve la risa aparentando no darme cuenta.
¿por qué no pruebas a guiñar un ojo al jefe? quizá cambie su cara y además te inspirará un nuevo diálogo de Lola. Eso si yo se lo guiñaría a lo Lina Morgan para evitar malos entendidos.
¡Bienvenida al trabajo!.
Muchos besos
No es mala idea lo de guiñar el ojo, si te sale mal puedes decir que te ha entrado algo de arenilla.
He vuelto hoy al trabajo. Ir, fui yo, lo que ha vuelto a casa no sé lo que es.
Besos.
Buenas, Guapetona... por la foto, digo... :)
Si, de nuevo por aquí con vosotros, amigos virtuales.
Del musikero que me mandaste... bueno, pokito a poko, que ya lo pongo, ya... jajajajaja
Una pregunta: y la cara de tu jefe... como de perro pachón... de afgano, de buldog??? ;))
Besicos
Hola !!!.
Ya te veo morenita y guapa y respuesta despues de las vacaciones..
... de chuchos... pues me encantan... aqui en la ciudad imposible...
.. en el pueblo perro siempre y gato y pajaros.
..y el Jefe.... que decir siempre es el Jefe pongas la cara que pongas..
Besos
Pues, lo mismo digo. Que yo he ido el primer día tan formateado, tan pulcro, tan nuevo... Intentando comenzar como si hubiese entrado otro tipo en lugar de yo mismo. Pensando: Despacio Pepe, primero un pie, luego el otro; atención a tus reacciones, no saques las viejas roderas...
Bah...
Se me paró el corazón al comenzar a leer, luego me volvió a latir de alegría y por otro lado, a tu jefe, ponle cara de (como decimos acá):
"yo-no-fui"
jajaja
besos
jajajaja... da gusto comprobar que una no es un extraño ser de otro planeta, porque por lo que veo todos hemos vuelto igual de CHOFFF.............
!Animo chica! que le cogemos el tranquillo al tema laboral en un momento... mejor creerlo ¿ verdad ?
Un abrazo
No será que ladró tu jefe, en lugar del pobre animal.
Bueno ya sabemos que perro ladrador poco mordedor. Un peñazo volver al curro de nuevo supongo.
Ánimo que ya mismo habrá algún puente para aliviar la presión.
Besos de recién aterrizado.
Guau, guau, depresión postvacacional clara.
Te deberías de venir a trabajar conmigo a Fuengirola, con aires del sur y mar.
Tomatelo con filosofía.
que alma tan hermosa y transparente tienes...un beso de azpeitia
Menos mal que la historia del perro tenía final feliz. Uff!!! Ese tema me afecta mucho... Me encantan los perros.
Besoss
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