sábado, noviembre 22, 2008

ADIÓS EN UN JARDÍN

Eran las cinco de la mañana, como la canción, cuando su corazón de nata estalló por las patadas de un miserable… Fue hace una semana y sigo pensando en ese muchacho de apenas dieciocho años. Me digo “Podía haber sido uno de tus hijos” y se me sigue helando el ánimo mientras la sangre hierve.

Hay un mundo, al cual aunque no me guste yo también estoy metida en el engranaje, que funciona con nuestro consentimiento a pesar de ser vil y oscuro. Actúa con total impunidad. Un fajo de billetes para mirar hacia otro lado, una irresponsabilidad e ignorancia de los padres. Unos profesores, a veces atados de manos, otras, no cualificados, contribuimos a que el alcohol, las drogas y personajes siniestros sigan girando alrededor de los cachorros del futuro.

Y mientras, nuestros jóvenes sortean toda clase de experiencias y algunas se las podíamos evitar porque, ¿qué aporta una borrachera tras otra y una o mil rayas?
Quizá, si esos locales, que se mantienen gracias a nuestros jóvenes, fueran de verdad sancionados y vigilados por las instituciones, hoy ese muchacho, una semana después, estaría volviendo a casa, un fin de semana más de su larga vida. Porque Álvaro estaba comenzando a recorrer su juventud y le esperaba un mañana que un miserable se lo truncó.

Nuestro presente sólo habla de crisis y recesiones financieras, ¿acaso nuestros zagales no están inmersos en la peor depresión?

Hoy, me he despertado comprendiendo más a mis jóvenes, metiéndome un poquito más en su piel; sé que me necesitan y aquí estoy, ESTAMOS TODOS.

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Mª Ángeles, qué razón tienes. Se me desencolan los ojos leyéndote. Ahora, sin embargo, estoy desde un ordena prestado: digamos... que me toca vagabundear. Pero en cuanto tenga un ratito, me pasaré más despacio. Como mereces.

Hasta pronto.
Un beso.

Carlota dijo...

¿De verdad que estamos? creo que estamos inmersos cada cual en los problemas que nos atañen, mirándonos nuestros propios ombligos, y reaccionamos temporalmente cuando pasa algo así... hasta la próxima. La crisis actual (existe, que no me vengan con milongas de que no)está afectando a muchos, y cada uno busca como salvar su propio pellejo. Ellos, los jóvenes, se enfrentan a un mundo en el que no ven posibilidad de futuro. Y me pregunto que hubiera sido de mí si me hubieran ofrecido una adolescencia o juventud sin ilusión alguna... el papel como padres es importante, mucho, pero necesitan otros soportes más a los que agarrarse, y son los que fallan. Un beso, lo siento, hoy me falta optimismo.

sagitario dijo...

olá maria
gracias por tua visita ao meu modesto blog.
Adoro Espanha, principalmente Barcelona, não conheço Madrid, mas irei conhecer, mas o vosso povo tem muita alegria de viver e isso é muito bom.

teu blog é muito rico e tem paisagens e musicas lindas.
Vou voltar sempre com todo o prazer, pois me encantou
Bom fim de semana e tudo de bom

aapayés dijo...

Saludos bello... el conocer y comprender a nuestros jóvenes, que trabajo pero no imposible...

saludos un abrazo

MRB dijo...

Hay tantos temas candentes. Si pudiéramos solucionar tantos problemas del mundo... no nos alcanzaría la vida. Al menos, poner nuestro grano de arena y sumarnos; habría ya una gran cifra.
Un abrazo,
Shanty

María dijo...

La vida es una constante marejada de emociones, de vivencias, para todos.

Un placer leerte.

Besos.

Unknown dijo...

Que buen post, me ha gustado, profundo, sincero y generoso, nuestros jóvenes nos necesitan hoy mas que nunca, estoy de acuerdo y creo que los tenemos alejados de nosotros y metidos en una vida que les impide ver lo que realmente merece la pena.

Un abrazo