lunes, febrero 15, 2010

PRELUDIO (Serie Lisboa I)

“La necesidad de un amor nuevo significa fidelidad al viejo”... Y la dijo que había sido tan feliz anteriormente que decidió probar suerte nuevamente.

Ella se parecía a la anterior como un cascabel a un libro de botánica, pero tal vez fue lo que a él le atrajo de ella.


Han pasado veinticinco años desde entonces, y él se ha acostumbrado a los sobresaltos, a un vivir sin saber qué le deparará el destino en la media hora siguiente, o cuando llegue a casa si encontrará una historia que le espante el sueño; quién sabe...

Le hubiera gustado que ella fuera más racional, sin embargo sigue ahí enamorado de una mujer poco común.


… En una tasca del Chiado lisboeta él la mira como el perrillo fiel que siempre ha sido, y ella no deja de asombrarse el amor que aún destilan esos ojos gastados por el tiempo y que se iluminan cada vez que ella está a su lado.

15 comentarios:

TORO SALVAJE dijo...

Parece que Lisboa os ha sentado muy bien.

:)

Besos.

MarianGardi dijo...

Que bueno sentir esa luz en la mirada!!
un besote

aapayés dijo...

Dicho y visto así... es el amor


Un abrazo
Con mis
Saludos fraternos de siempre..

Que tengas una semana maravillosa.

Ricardo Tribin dijo...

Yo tambien he sido ese "perrito fiel", unas veces mas..otras menos. Hoy lo soy 100%

Te mando un beso

guillermo elt dijo...

Me recordastes estos versos de un poema que publiqué el 27 de Abril de 2008, titulado "Locos de amor"

"...

Sea nuestro amor,
como en las historias de antes,
en las que los amantes
el uno por el otro moría.

Sea nuestro amor, en fin,
el aire mismo que respiremos.
Nuestro sustento diario.
Sea el sol y la luna.
Sea nuestro firmamento.
Y que la tierra entera no tenga,
cabida para acogerlo.

Que las gentes, al vernos,
nos tomen por lo que somos:
dos locos de amor, enamorados.
Y que murmuren y critiquen
sin poder entenderlo,
pero que en el fondo deseen,
un amor como el nuestro.

..."


Si vas a leerlo entero al blog... pues sí, está hecho así, con toda la intención.

:))

Besicos... Me ha encantado.

Jesús Arroyo dijo...

Cantalapiedra:

¿Qué tiene el muro do Carmo
que sus ruínas me llaman
cuando el ascensor se para?

Besos.

José Luis López Recio dijo...

Los viajes siempre despiertan la imaginación, aunque en tu caso no es necesario porque es inagotable y divina.
Un abrazo.

Anónimo dijo...

Interesante forma de escribir acerca de los equilibrios/desequilibrios de pareja en el tiempo cuando apenas ya si queda tiempo. A mí los sustos me dan pánico. Los viví allá por los años veinte (me refiero a los míos) y además de que me ponen del revés, me tornan un ser improductivo, gris y bloqueado. En mi caso, la tranquilidad emocional va ligada estrechamente a la fertilidad laboral y de ocio.

Por fortuna, todo eso ya pasó.


(Qué bonita es Lisboa: biquiños)

ALBINO dijo...

"Quem non viu Lisboa, nom viu cousa boa". Ya contarás, pues así lo anuncias, más capitulos sobre esa estancia en la ciudad de Camoens y de Amalia Rodrigues, dos símbolos totalmente contrapuestos.
Quiza ese aspecto decadente de algunos barrios como la Alfama o el Alto le dan una belleza de reliquia casi religiosa, sobre todo cuando se matiza con el sonido del fado, esa canción que hay que escucharla casi con reverencia.
Espero tus siguientes noticias.
Un beso

Juan Antonio ( Amaneceres mios) dijo...

Me gusta cuando escribes como mujer enamorada, esa serenidad y paciencia ,esa facilidad para contemplar y razonar es el morbo de la madurez.Ojala tengas a tu lado a ese " perro fiel " siempre.Sera buena señal.
Felicidades,como siempre.

El Drac dijo...

Es que lo que pasa es que le amor es complementarse, no que ambos sean parecidos. Hay parejas disímiles que tienen muchos años de matrimonio feliz, con sus peleas pero siempre juntos.

JULIO dijo...

Aguardaré con impaciencia el acaecer de unos hechos y unos personajes que buena pinta tienen...

Yo también estuve enamorado a los 25 años...

La visita de lo foráneo te reconcilia con lo añejo y tierno de la pubertad lejana.


Un beso, preciosa.


Julio.

Luis y Mª Jesús dijo...

Un cascabelillo que alegra la vida.
Libros hay muchos pero casacabelillos a los que amar, que correspondan a la fidelidad. ¡Menuda suerte contar con un cascabel fiel en la vida!
Un besazo

centro de llamadas dijo...

El amor es una decision y muy hermosa pero quien decide amar de verdad y serle fiel a ese sentimiento en las buenas y las malas.

Maria Coca dijo...

Qué bonito!!!! Me encanta éste relato. Pasión, amor y sueños. Precioso, amiga.