domingo, abril 20, 2008

LOCO POR TI


Hoy he soñado contigo. Agitabas la cabeza y tu pelo eran briznas de espuma saltando en la orilla de nuestras playas.
“Estoy loco por ti”, te susurraba mientras me hacías gestos para que acercara mi cuerpo al tuyo… Y yo temblaba electrizado de deseo.
Lanzabas tu voz y el eco del sonido se zambullía en mis oídos mientras el deseo crecía y crecía… “Estoy loco por ti”, te repetía. Tus ojos de ámbar, dulces, suaves, recorrían cada centímetro de mi piel.
De pronto, noté tu boca en mi cuello… Suspiré y mis párpados se entornaron. Quise guardar esa sensación. Codicié que se hiciera eterna entre tanto tus labios iban y venían… “No, para”, te dije. Necesita respirar, el aire se me evaporaba y tú, tú, siempre tú, seguías impertérrita a mis súplicas acercando, esquivando tu cintura a la mía… Y se hizo la noche. Amaneció…, tu mar estaba en el mío y yo en el tuyo. Me habías dominado. Nuestras yemas jugaban con las nubes; éramos dos mariposas saliendo de la crisálida.
Hoy soñé que volvía a estar loco por ti…

26 comentarios:

ana dijo...

No sé si es bueno estar tan Loco por alguien, perder la cordura es algo terrible más cuando no se sabe nunca donde está la puerta de salida. Se sufre demasiado con tanta entrega. Pero siempre podréis salir volando ya sabes te crecen alas después de un tiempo.
Un beso MªAngeles,
ana.

Carlota dijo...

Muy bonito. Así da gusto soñar... un beso!

WILHEMINA QUEEN dijo...

ay María Angeles!!!!!!!!!!! qué lindo sueño!!!!!!!!!!!
mmmmmmmmmm
jiji

besiños!!!!!!!!!!

Mª Ángeles Cantalapiedra dijo...

Ana y sus alas para salir volando; no mala idea: me sumo a ella.
El post me lo inspiró la canción de fondo "Crazy for you" que es sencillamente preciosa... para mí jajajaja

Mª Ángeles Cantalapiedra dijo...

Carlora: gracias tesoro. Escuchar música a veces me inspira estas cosas.
Un besote

Mª Ángeles Cantalapiedra dijo...

Wilhemina qué alegría volverte a ver y MUCHAS GRACIAS por leerme

Ego dijo...

Se besaban deprisa, con un ansia que hasta entonces no habían empleado. Se besaban así por cada uno de los días que no habían podido besarse, y parecía que quisieran comerse el alma el uno al otro. Y las más noctámbulas estrellas, que aún no se habían rendido al lejano soplo del amanecer, pudieron ver nítidamente la escena, pues no existía edificio ni antena que se lo impidiesen. Afanosos y vehementes, se mordían, se tocaban, llevados por un instinto irracional que les exigía cohabitarse el uno en el otro, recorrerse, beberse el aliento, casi que enamorarse.
El cielo negro fosforecía. Mario sintió otra vez las ganas de llorar. Los besos eran ahora ahogos rabiosos que no acababan de comprenderse a sí mismos. Una caricia. El Universo entero cabía en una caricia. ¿Cómo puede cuantificarse un beso? ¿Cuánto vale la ternura? ¿Cuánto vale un silencio?
Pero dolía, y mucho. Volvía a flotar en el interior del coche la duda de todas las veces. Y se preguntaban en voz alta si de veras merecía la pena mantener esa locura, ese disparate siempre insatisfecho que luego, cuando regresaran a su vida cuerda, lúcida y prudente de cada día, les hostigaría y hasta impediría disfrutar del recuerdo de esa otra noche ganada.
Se cuestionaban si era o no un acto inmoral. Mario se acordó de los curas de la escuela. Según los curas de la escuela, lo era del todo. Pero la moral es relativa, y depende de las circunstancias. Tal vez era todo producto de un caos psicológico que algún día superarían; pero también el caos tiene leyes, aunque sean ignoradas. ¿Habían fracasado acaso? Fracasa sólo el que no osa. Allí no importaba lo que pudiera pasar al día siguiente, quizás porque el día siguiente podía no llegar nunca.
Si por casualidad llegaba, volverían a sonreír al levantarse, y al llegar al trabajo, volverían a discutir con algún gerente estúpido que les sacara de quicio, y nadie sospecharía nada. Eran maestros en el arte de guardar las formas, aunque no hubiera contenido. Aunque también doliese mucho.
Camino a la ciudad, Mario conducía más despacio, nervioso, mimado por una mano dulce que reconocía cada palmo de su piel, insatisfecha y amante, como siempre. El pecho, la cara, la entrepierna abultada, las manos. Apenas había coches en la carretera. Mario repensó que no bosquejaría ningún mañana. Bastante tiempo de su vida perdía ya organizando su vida. No precisaba desperdiciarlo más.
¿Y si se atrevía? ¿Qué podría pasar si se atrevía a prolongar la noche? No le quiso dar muchas vueltas; si lo meditaba, jamás actuaría. En un cambio de sentido, giró el volante. La mano dulce, insatisfecha y amante interrumpió su menester:
- ¿Dónde vamos, Mario?- susurró con una cadencia extenuada y somnolienta.
- Créeme que eso no importa, Javier.
El oriente germinaba en el linde que separa el éter de la tierra. Pero el coche de
Mario rodaba en dirección contraria. Tenía miedo de que tampoco el amanecer les aceptara.

Leo dijo...

La imagen la tengo de fondo de pantalla en el trabajo. Está mejor con tu microrrelato debajo.
Esas sesaciones, hace algún tiempo que...,me dieron calabazas.

Un beso Trianera, y gracias por tus pasos por el patio. Aunque no lo creas, los percibía, durante mi "via crucis".

Anónimo dijo...

ego: no te lo tomes a mal pero no te parece afán de protagonismo?? ya sé que tu nombre lo indica pero en fin, ya tienes tu blog para ello. bueno, no pasa nada no puedes hacerle sombra.

José Manuel dijo...

Con tu forma de escribir, es difícil no estar loco por ti, y sé que no lo estoy soñando...
Yo estoy aún en el proceso post-crisálida, vamos que soy un "capullo" por no haberte conocido antes...
Besos

Daniel Rico dijo...

Bellisimo tu sitio, lo he disfrutado mucho y me he bajado cosas para leer luego en casa, con mas calma

Unknown dijo...

muy lindo, yo tambien estoy loco por alguien y esa locura es peligrosa y mas cuando hay incertidumbre y ansiedad...

Mª Ángeles Cantalapiedra dijo...

Egooooooooooo guauuuuu, menuda imaginación la tuya... Me alegro que mi post te haya inspirado así como la musica.
Gracias

Mª Ángeles Cantalapiedra dijo...

Leo, campeón... Aunque esas sensaciones te hayan dado calabazas, piensa en positivo: alguna vez las sentistes y fueron maravillosas ¿a qué sí?
Gracias por tu visita

Mª Ángeles Cantalapiedra dijo...

Anónimo, gracias por echarme un capote.
Aquí cada uno dice lo que quiere, anarquía total, claro, dentro de un orden, jajajajaja.
Un besote sea quien seas, me gustó tu detalle

Unknown dijo...

Que lindo, M. Angeles, no hay duda que sentir que alguien esta loco por una, es muy muy excitante....y corresponder mas.... y si es en esa playa con ese amanecer.... bueno... lo mas....

Besiños.

Mª Ángeles Cantalapiedra dijo...

José Manuel, guauuuuuuuuuuu, qué palabras más bonitas me dices, un millón de gracias.

Mª Ángeles Cantalapiedra dijo...

Hola Daniel ¡nuevo en la plaza!, gracias por elegir este lugar. Ven cuando quieras, serás muy bien recibido.

Mª Ángeles Cantalapiedra dijo...

Otra vez viajar... bonito nick. Ven cuando quieras y sí, siempre hay que estar loco aunque sea peligroso, pero esa locura te hace sentir cosas maravillosas, ¿no crees?
Un saludin... ah y vuelve

Maria Coca dijo...

Me encanta tanto el comienzo como el final. Un sueño infinito de pasión que debe seguir siendo eterno. Hermosas letras, Mari Ángeles.

Besoss

Mónica dijo...

ma. angeles, espectacular relato, es como a mi me gustan... Bsss

Nos vemos.

ana dijo...

MªÁngeles, niña, por donde andas?, echo de menos las cositas que escribes, vuelve!!!!!
un besito
ana

Mª Ángeles Cantalapiedra dijo...

Gracias Estrella por tu lectura.
Un besazo

Mª Ángeles Cantalapiedra dijo...

Maríiiiiiiiiiiiiiiia, gracias por venir. Un bezaso

Mª Ángeles Cantalapiedra dijo...

Mónica buenas noches. Gracias por venir también a este blog.
Un besin

Mª Ángeles Cantalapiedra dijo...

Anita, hija, casi no tengo tiempo, llevo días con mucho trabajo, pero espero hoy subir algo.
Un besito