lunes, mayo 19, 2014

NECESITO QUE HOY ME ESCUCHES...

Cuando uno se acuesta al final del día lo normal es que lleve la mochila vital cargada, a veces demasiado pesada, pero al despertar después de un sueño reparador tenga las pilas cargadas para afrontar el nuevo día y las situaciones, las circunstancias, todo lo vea, lo sienta, más liviano y seas más permisivo, al menos las primeras horas del día, o como dice un dicho por ahí “hasta que venga alguien y lo j…”. Pero yo hoy, además de despertarme muy dormida, lo primero que he visto al encender el ordenador ha sido al político de turno vendiéndome no sé qué “moto” y me ha dado por pensar el mal fario que me da esta gente últimamente, y eso que estaba dormida porque si llego a estar despierta, quizá se me hubiera escapado alguna lágrima, porque soy de las que piensa que en la vida hay que creer, luchar porque la esperanza no se te escape del corazón, y más cuando uno vive en sociedad; quiero decir que hay que creer, confiar, en las instituciones, dado encima que estamos en una supuesta democracia y podemos elegir cada cierto tiempo. Pero mi problema hoy es que no creo, me parecen una gentuza, ni siento que hay un personaje, da igual la ideología, con el suficiente carisma para que el español medio, gente corriente como tú y como yo, podamos confiar y hasta cierto modo ilusionarnos. Porque no es solución que tú y que yo cerremos los ojos para no ver o miremos en dirección contraria. No, tú y yo tenemos la suficiente inteligencia, sensibilidad, compromiso, para darnos cuenta de lo que pasa y por tanto a negarnos a admitir tanto “soplatubos”
Sí, cada vez estoy más despierta y siento que mi ánimo hoy está revirado… Y para estos días en que el sol no se enciende en tu predisposición, necesitas de gente que ilumine tu entorno, gente normal como tú que te tienda una mano o te dedique una sonrisa y así coger el plumero y quitarte las telarañas o comenzar tu trabajo, en resumidas cuentas, con la sensación de que la sangre nunca llega al río y que, aunque sea en el último minuto, hay algo que te salva de esa frustración que a veces sientes según despierta el mundo cada día.

Sí, mi última reflexión antes de coger el aspirador, es que menos mal que nos tenemos, tú y yo, nosotros y vosotros para dedicarnos un abrazo, una palabra de aliento, un buen deseo, una mirada cariñosa, una sonrisa acogedora, y que se note esa buena gente que somos porque somos muchos, muy majos, muy sanos, que nos apoyamos los unos en los otros, que nos ayudamos para seguir ”palante” con la cabeza alta y con buen humor.

No hay comentarios: