domingo, diciembre 06, 2009

EL EXTRANJERO

Cuando llegamos, había poca gente, pero el ir y venir de los que allí trabajaban, se palpaba que sabían muy bien de lo que se cocía en sus manos, en sus gestos…

Tal vez lo que hayan visto sus ojos, luego lo cuenten a su gente como algo más de su día a día, como experiencias que curten y le ayudan a bandear temporales, a saber estar en su profesión. Pero a mí me llamó la atención su actitud de temple tranquilo, de aguantar vientos alisios, terrales de tormenta, brisas…, de escuchar y luego él con su acento de tierras lejanas explicar de qué iba aquel lugar, cuál eran sus normas. Seguramente en su humilde familia le cimentaron en la educación y cuando llegó aquí sólo necesito pulirle para que saliera el brillo interior.
Era un chico de no más de veinticinco años, pelo corto, timidez en la mirada y sonrisa condescendiente. Ni guapo ni feo, pero su ángel se escapaba a chorros por los poros.
Le estuve observando toda la noche su buen hacer con el brazo en alto y en la copa, la bandeja repleta. Esquivaba aquí y allá, sin duda era un conductor de primera pues en ningún momento le vi un mal requiebro, ni siquiera una duda.
Al rato de conocerle, aparecieron otros tantos como él, de igual porte, idéntica actitud.
… Y hoy aquí estoy hablando de un ser anónimo que me hizo sentir orgullo ajeno, sin duda siendo ejemplo para muchos de un estupendo camarero, o camareros, que saben tratar a jóvenes y a mayores y dignifican una profesión.

12 comentarios:

WILHEMINA QUEEN dijo...

QUé bueno María Ángeles, todo trabajo debería ser llevado, mostrado y hecho con orgullo y respeto.

Un abrazo!

Jesús Arroyo dijo...

Si es que, de vez en cuando, nos encontramos profesionales que no solo lo son con su aptitud, también lo son de su actitud. Cóctel importante.
UN beso de este dominguero.

Mª Ángeles dijo...

Lo mejor de esta vida es que cada uno aprenda a ser persona, a partir de ahí ya puede plantearse el ser buen profesional en su gremio.
Me alegro que te hayas topado con buena gente. Afortunadamente quedan muchas personas buenas.
Un saludo

TORO SALVAJE dijo...

Pues es todo un descubrimiento porque no quedan muchos.
No sé si por los horarios, por el sueldo o porqué pero no hay buenos profesionales en el sector.

Besos.

Micaela dijo...

Cualquier trabajo es digno y si se hace con amor es mucho más extraordinario. Eso se refleja en la persona, en su rotro, en su sonrisa. Un abrazo grande.

Juan Antonio ( Amaneceres mios) dijo...

Quizas el problema de que no haya tan buens camareros sera por que se ha perdido el trato afable entre personas y lo que hizo Mº Angeles de fijarse sea hoy una excepcion y pasamos ante las personas como si fueran otro mobiliario urbano.Lo dijo Santa Teresa " Donde no haya amor,pon amor y encontraras amor "...Feliz puente a todos
http.//amaneceresmios.blogspot.com

guillermo elt dijo...

Vaya, estoy unos días perdido, y te veo de otro color... que pensaba yo que era mi vista, pero no... :))

Este post me recordaste a un camarero en Mojacar; argentino él con su labia argentina, simpatía argentina, moreno, majo y guapetón, tanto que, mi hija la pequeña, entonces 14 años, se quedó "prendaica" de él.

Besicos.

centro de llamadas dijo...

Digno trabajo pero mas digno es hacerlo con amor que lino es encontrarse una persona que ama lo que hace de verdad me encanta y me apasiona pq que lindo tratar y que te traten bien cuando requieres un servicio.

Anónimo dijo...

Qué importante es "ver" en medio de este desierto urbano.

Gracias, prenda.

Un beso.

ALBINO dijo...

Sigo creyendo que la profesionalidad y la educación son fundamentales a la hora del trabajo, y cuando existen, se nota.
Lamentablemente, cada día más, y en lugares que se dicen elegantes, aparece el confianzudo que te dice: Oye tu, que vas a tomar..
Mi respuesta es siempre tratarlos de usted.
Un beso

Luis y Mª Jesús dijo...

Es una maravilla encontrarse con nacionales o extranjeros que saben comportarse. Mi experiencia hoy con los extranjeros ha sido mala, me tocaba el turno en la sala de espera del hospital y Luis se retorcí, entonces un africano y una sudamericana comenzaron a decir que era una vergüenza lo mal que funcionaba la seguridad social, que las urgencias eran urgencias, todo ello chillando. Me pregunto como pueden criticar tanto la Ssocial espàñola, aunque tengan algo de razón, cuando en su pais no hay nada.
En fin...
Besos

Margarita dijo...

Es un gusto cuando te encuentras personas como este camarero. Todos los trabajos son respetables y dignos, y, todos, de alguna manera servimos a los demás. En los dos lados en los que nos encontremos en cada distinta situación se debería poner lo mejor.A veces es que vamos algo crispadillos por el mundo...

Me gustó mucho tu blog.


Saludos,

Margarita