Ya terminan los gozos de un diciembre
más en nuestras vidas. Hoy seis de enero se sellan sus puertas, se cierran para
volver otro diciembre, entre gozos y sombras, entre ausencias y nuevos
devenires.
Llueve, llueve tras mis ventanas. Lloran
mis cristales mientras una lluvia pertinaz se obceca en regar la tierra
sedienta, agrietada y famélica.
Diluvia, jarrea, rocía con susurros mis
pensamientos locos, gotea mis sueños sedientos, llovizna mis ojos claros.
Laten mis ventanas, palpitan mis
balcones de estrechos nubarrones allá donde el horizonte nace en la oscuridad
de una noche mágica.
Y yo miro, miro y miro con ojos de niña
esa lluvia dulce y juguetona chapoteando en el patio de mis interiores. Es agua
fresca, es lluvia fina en los portales de mis sensaciones.
Nado en silencios, saboreo soledades en
esta mañana de Reyes y paquetes, de risas y de llantos, de sorpresas y de
chascos, de burlas y alborotos…
Gozos de diciembre os guardo ya en algún
rincón de mi vida. Lejos no os vayáis y tomad un chubasquero pues hoy llueve,
llueve y llueve para regarnos a todos de sueños rotos y por hacer, de
realidades que circundas nuestras horas más silentes.
¡Gozos de diciembre, adiós! Y no os rompáis, vuestros colores son un cielo que yo dibujo cada día al calor de una mirada con su letra asonante.
3 comentarios:
Espero que termine tu diciembre con un 6 de enero lleno de regalos y un 2018 repleto de salud e ilusiones.
Olá, Mª Ángeles!
Destaco deste teu excelente texto, estes treco:
"Nado en silencios, saboreo soledades en esta mañana de Reyes y paquetes, de risas y de llantos, de sorpresas y de chascos, de burlas y alborotos…"
Um beijo.
Pedro
Qque sigan en enero muchos gozos. Si por ahí llovió . Por Aquí los Reyes dejaron mucha nieve.
Besos.
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