sábado, noviembre 18, 2017

MADRID...

Me gusta, me gusta, me gusta… Me gusta Madrid despeinado y en pijama. Me gusta bostezando y sin prisas. Me gusta  cuando silencia sus entrañas que rugen con un meloso parpadeo de rumores lejanos.

Me gusta mirarla de cerca asombrándome de su castizo estar de ciudad que acoge sin cuestionar quién eres. Me gusta su generosa modestia de ciudad abierta sin arrogancia, su acicalada figura de rascacielos y conventos, de ancianos paisajes con su renovado vestuario de rancio abolengo.

Me gustan sus mañanas sin fines predestinados, esas que te dejas perder y ella te acompaña sin preguntar a dónde vamos.

Me gustan sus mañanas luminosas de otoños tibios y terrazas al sol mientras tuestas sensaciones de placer. Sus tardes de largos ocasos y primaveras risueñas.

Me gusta su pátina de intelectual despistada por cualquier arista de su esencia de ciudad multicolor y cosmopolita, ella te ayuda a desplegar el placer de los sentidos por el arte, el de antaño y hogaño. O su despliegue de tortilla de patata y bocata de calamares… O esas noches de copas mientras la música de jazz se desliza de puntillas por tus cinco sentidos.

No me gusta Madrid para vivir de seguido pues su lejanía me abruma, el anonimato me hunde y la soledad me mata y yo soy de provincias, de ciudad chiquita y buenos días según sales de tu nido, sin embargo me encanta esa sensación que me regala Madrid de turista accidental según palpo su piel y la miro con mis ojos clandestinos. 

7 comentarios:

Macondo dijo...

A mí tampoco me gusta para quedarme, porque también soy de provincias, pero unos meses que tuve que vivir allí comprendí por qué decían que en Madrid nadie se siente extraño. Me encanta Madrid.

Maripaz dijo...

Me ocurre como a ti, soy más de pueblo, pero ahora me acabo de mudar a Pamplona y le estoy cogiendo gusto.
Un abrazo inmenso querida amiga.

Marigem dijo...

¡¡¡Hola!!! Me pasa igual, soy de provincias pero Madrid engancha, hay que ir de vez en cuando y si hay algo que me gusta es llegar, esa llegada...he ido en tren muchas veces y salir al andén de Atocha o Chamartín(depende) a respirar la amanecida, llegar en el Alsa nocturno algunos días de verano y sentir el embrujo de la noche, o llegar en coche y sentirme pequeñita...adoro Madrid y necesito volver pronto.
Besos.

Beatriz Martín dijo...

Sentido relato mágica descripción entre el otoño y la primavera, yo la verdad hace 14 años que llegué de Caracas y Tenerife me parecía muy amable la gente pero me daba la impresión , bueno la impresión que te conocía todo el mundo ahh si t´eres sobrina de tal hija de tal s ah si yo los conocí cuando emigraron a Vzla y y eso al principio me agobió mucho con los años me acostumbre a la tranquilidad de esta pequeña pero hermosa ciudad como Santa Cruz de Tenerife............ en 2011 me fe a vivir a Madrid una pasada me traía recuerdos de mi Caracas de antaño, duré un año, echaba de menos el mar y el clima , así somos seres humanos hoy adoro Tenerife un besote preciosa

Ambar dijo...

Totalmente de acuerdo contigo. Madrid es una ciudad extraordinaria para pasar unos días o una temporada pero para vivir no, pienso que si viviera allí tendría la sensación de diluirme en su asfalto.
Voy dos o tres veces al año porque siempre hay exposiciones que contemplar, obras de teatro que ver y amigos con los que reencontrarse. Me encanta Madrid
Besos

Pedro Luso de Carvalho dijo...

Belíssima crônica, Mª Ángeles, "MADRID...", com trecho belos como estes, em que inicia:

"Me gusta, me gusta, me gusta… Me gusta Madrid despeinado y en pijama. Me gusta bostezando y sin prisas. Me gusta cuando silencia sus entrañas que rugen con un meloso parpadeo de rumores lejanos."

Ótima semana.
Um beijo.
Pedro

Laura. M dijo...

Te comprendo muy bien amiga. Por el trbajo de Paco hemos vivido en ciudades grande, y cuando tuvimos ocasión nos mudamos a un luar más pequeño. Béjar es tranquila y con buena calidad de vida, se puede u ir andando a todos sitios y conoces a todo el mundo. Tenemos un hijo viviendo en Madrid y vamos a menudo, pero ese bullicio nos gusta solo unos días.
Besos.